Hoy, 31 de diciembre, estamos a tan solo unas horas de despedir el año y recibir uno nuevo con los brazos abiertos. Los fuegos artificiales, las cenas de gala, el champán y la fiesta estarán presentes esta noche a lo largo y ancho del planeta.

España y los países hispanohablantes de Latinoamérica gozan de unas tradiciones muy arraigadas para el cambio de año. En este artículo, te invitamos a descubrir algunas de ellas. Si quieres continuar leyendo acerca de la Nochevieja en inglés, haz clic aquí. Y tú, ¿qué haces esta noche?

España

En España, la Nochevieja es el momento más festivo de todas las celebraciones navideñas. Normalmente, las familias se reúnen para cenar y esperar el momento de las doce campanadas. Ahí es donde tiene lugar una de las tradiciones más populares de la Nochevieja española: las uvas.

Cada 31 de diciembre, a las doce de la noche, los españoles permanecen atentos a la televisión. Desde el reloj de la Puerta del Sol de Madrid, se retransmiten las doce campanadas que dan paso al año nuevo. Con cada golpe de campana, se come una uva, hasta completar las doce. Una vez finalizado este ritual, la familia se felicita el nuevo año y festeja su entrada en él.

Este ritual, que encuentra su origen en un excedente de uva alrededor de 1900, se suele acompañar de los tradicionales cotillones. Se trata de unas bolsas que contienen adornos, disfraces, juguetes, confeti y matasuegras, entre otros objetos festivos.

Para atraer la buena suerte, además de la ceremonia de las uvas, es costumbre llevar ropa interior de color rojo y, en ocasiones, introducir una alianza en la copa de cava o champán con la que se brinda por el nuevo año. A partir de las doce, las casas y los bares se llenan de fiestas de año nuevo. Antes de finalizar la velada, es muy habitual tomar el típico chocolate con churros.

Latinoamérica

Las piñatas son las protagonistas de la Nochevieja en México. Originalmente, eran de barro. Hoy en día, suelen estar hechas de papeles de colores y pequeñas lucecitas que atraen la buena suerte para el año que comienza.

Además de las uvas y la ropa interior roja, existen un par de tradiciones muy curiosas. Para atraer la prosperidad económica, los mexicanos visten prendas íntimas de color amarillo. Si además quieren propiciar un año lleno de viajes, sacan sus maletas fuera de casa.

Algo parecido hacen en Ecuador. Allí, muchos dan una vuelta a su manzana con la maleta lo más rápido que pueden. De esta forma, pretenden también favorecer los viajes.

Una de las singularidades del Año Viejo en Colombia es la quema de muñecos. Antes de las doce de la noche, se preparan figuras que representan, en ocasiones, a personalidades reconocidas. A continuación, los rellenan de fuegos artificiales que activan llegada la medianoche. De esta manera, los muñecos prenden fuego y las chispas inundan el cielo, dejando todo lo malo del año atrás.

La tradición de los muñecos es muy popular también en Perú. Allí, se queman figuras hechas de telas viejas, periódicos o trozos de madera. A menudo, las figuras representan a personajes poco populares entre los peruanos y se les ponen carteles con nombres de políticos y otras celebridades.

Una de las costumbres más destacables de Venezuela es lanzar un puñado de lentejas al finalizar la cuenta atrás, para enterrar la mala suerte. En Argentina, las buenas temperaturas propician un ambiente festivo con colores veraniegos.

Esperamos que hayas aprendido algo más acerca de cómo se celebra la Nochevieja en los distintos países de habla hispana. Esta noche, te animamos a practicar la tradición que más te haya gustado con tus amigos y familiares. ¡Feliz año nuevo!

¿Cuál es el plato más típico de toda España?

¡La tortilla de patatas!

Pues hoy traemos la receta para que seas tú mismo el que lleve el sabor de España a tu casa. Así que, muy atento, prepara la cocina y… ¡a por la tortilla!

Lee este artículo en inglés

Vamos a ver qué ingredientes nos hacen falta antes de empezar:

• 700 gramos de patatas
• 1 cebolla mediana
• 6 huevos medianos / grandes
• Aceite de oliva
• Sal

Como ya tenemos los ingredientes a mano… vamos a empezar.

En primer lugar, pela, lava y corta la cebolla en dados pequeños y las patatas en rodajas finas.

Cuando lo tengas listo, pon en una sartén una buena base de aceite a calentar. En cuanto coja temperatura, fríe las patatas con un poco de sal a fuego suave. Así se irán cocinando por todas partes sin que lleguen a quemarse. Ten paciencia, que esto puede tardar entre 25/30 minutos, depende del grosor con el que las hayas cortado.

Antes de que pase todo este tiempo, cuando se estén empezando a dorar, mete la cebolla en la sartén. Así cocinarás todo al mismo tiempo y no se quemará la cebolla.

Mientras se fríe todo, aprovecha para poner los huevos con una pizca de sal en un bol y a batirlo todo muy bien.

Cuando las patatas y la cebolla ya estén hechas, sácalas, deja que escurra el aceite y añádelo todo al bol con el huevo batido y un poco más de sal.

Remuévelo todo y déjalo un par de minutos, así las patatas absorberán bien el huevo.

Mientras tanto, prepara una sartén para seguir con la segunda parte de la tortilla. Puede ser la misma sartén de antes, pero quitando casi todo el aceite, o puede ser una sartén limpia echando una cucharada de aceite bien repartida por la base.

Pon este aceite a fuego suave a calentar y echa la mezcla de huevo, patatas y cebolla.

Poco a poco, verás cómo se va cuajando el huevo y cómo va tomando forma. Para que no se pegue, separa de vez en cuando con una espátula los bordes y la base de la tortilla, es probable que se vaya quedando pegada.

Antes de que se cuaje por completo, pon un plato llano amplio (que cubra toda o casi toda la sartén) encima de la tortilla y dale la vuelta. En cuanto hayas hecho esto, pon de nuevo la tortilla por el lado que falta por cuajar en la sartén y deja que se cocine unos minutos más.

Y cuando esté todo a tu gusto, apaga el fuego y saca de nuevo la tortilla de la sartén.

¡Ya está lista tu tortilla de patatas!